Gaita de Boto

Gaita de Boto

Entre los modelos de gaita que encontramos en la Península Ibérica, la Gaita de Boto es uno de los más interesantes. El fuelle o boto, que da nombre al instrumento, es un odre enterizo de cabrito. En los orificios de las patas delanteras se alojan el "soplador" y el "bordón mayor". El "clarín" y la "bordoneta" van sobre una sola pieza de madera, alojados en el orificio de la cabeza. Los bordones llevan lengüeta simple, y el "clarín" lengüeta doble. A primera vista llama la atención la piel de serpiente que sirve de forro al clarín y a la bordoneta, con presuntas connotaciones mágicas, y ciertas funciones técnicas, como son el aislamiento y la consolidación de la madera.

No menos notable es el "vestido" alegremente estampado que cubre el boto, único en la Península. Dice la leyenda, que su utilización partió de un gaitero invidente que, al perder a su hija de corta edad, tomó su vestido y envolvió el fuelle con él, para poder recordarla por el tacto mientras tocaba.

La costumbre de cubrir los fuelles con elementos textiles queda claramente anotada en el Diccionario de Covarrubias, que en 1611 al definir el término "gayta", anota que es un instrumento "de los que se tañen con ayre alegre, (...) y lo es este en su armonía y también por la cubierta del odre, que de ordinario es de cuadrillas y escaques de diversos colores". Este diccionario añade a continuación la entrada "Gaitería", referido a aquel cuyas ropas coloridas en exceso no le sientan bien, ya que este término en su segunda acepción anota: "Dixose por la cubierta que ordinariamente ponen al odrecillo de la Gaita, de muchos colores".

Tipo de instrumento
Aerófono
Una colección de
Luis Delgado
Procedencia
Aragón, España