Se trata de uno de los instrumentos más antiguos utilizado en la actualidad, ya que aparecen ejemplares desde el periodo Neolítico. Su utilización, como instrumento comunicador y ritual, se extiende desde la Polinesia hasta España, pasando por varios países de Sudamérica, Asia, etc...
En algunos lugares, como en el Tíbet, las caracolas se decoran profusamente con incrustaciones de plata y gemas.